martes, 4 de enero de 2011

LA SEQUÍA

No busques más; 2104
un dios inexplicable ha comprendido.

Te devolverá también tus ceremonias.

Y cargarás enteros
aquellos lienzos donde esculpiste mis arrugas;
los diagramas inocentes de todos tus embustes;
los sofocos miserables
bajo mi piel.

Yo adivino tus días en los trenes
capeando sobresaltos;
tu correr inseguro en el andén inalcanzable;
tus pausas escurridas bajo mi grito ciego.


Mi verso inútil
y la última gota de sal sobre la almohada.


No tiene caso ya
que leas estas notas imprevistas.


Camina hacia ese dios absurdo que te impulsa
y reclámale la devoción negada;
yo acopiaré apenas tu sonrisa.


Un bostezo de luz para mi ocaso.

© Teresa Palazzo Conti
www.lapoesiadeteresa.com

LIBERACIÓN

Acaso por el verso de papel y cristales
que un día amanecimos,
enarbolo esta líneas.

Me siento a la derecha del sol
para violar la oscuridad
de todas tus huidas;
de todos los rincones ofendidos,
y te celebro en caudal transparente.


Me disfrazo de brisa
con la osadía primera
de ser en tu desvelo,
el soplo necesario.

Soy agua que bautiza tus labios y tus sueños.

Los silencios.

He inventado un universo de nuevos horizontes,
y una casa sin puertas ni ventanas
para volar los pasos que ayer nos distanciaron.

Ahora estoy a salvo de cuanto nos separa.

©Teresa Palazzo Conti
www.lapoesiadeteresa.com